Una industria en constante cambio

La sensibilidad auditiva siempre ha estado presente en nuestras vidas, por lo que ya en el siglo XIX se utilizaban audífonos simples. A comienzos de este siglo, las trompetillas fueron usadas para capturar y dirigir más sonido dentro del canal auditivo, pero a comienzos de la década de 1890 aparecieron los primeros audífonos electrónicos. Estaban inspirados en el teléfono y utilizaban un transmisor portátil de carbono para amplificar las señales débiles de los sonidos.

En la década de 1920, los ingenieros navales inventaron los audífonos de tubo de vacío, que utilizaban un transmisor telefónico para convertir el sonido en señales eléctricas. Podían transportarse con mayor facilidad que los audífonos de carbono, pero necesitaban dos baterías grandes.

En la década de 1950, Bell Laboratories, Raytheon, Zenith y Texas Instruments comenzaron la carrera para incorporar nuevos sistemas transistores más pequeños y eficientes a sus audífonos. La tecnología de las baterías también mejoró de manera sustancial a fin de lograr dispositivos mucho más pequeños.

La invención del microprocesador significó la posibilidad de tener audífonos mucho más pequeños y poderosos. Muchos de los audífonos lanzados con posterioridad a 1977 combinaban circuitos digitales y analógicos y les daban a los diseñadores la libertad para crear una tecnología mucho más portátil.

Los chips para el procesamiento digital de señales se inventaron en 1982 y fueron adquiridos rápidamente por la industria del cuidado de la audición. A pesar de que mejoró la tecnología de amplificación del sonido, implicó un retroceso en términos de tamaño y de facilidad de uso de los dispositivos. Sin embargo, a mediados de la década de 1990, fue lanzado el primer audífono totalmente digital que se colocaba detrás de la oreja y era capaz de computar 40 millones de instrucciones por segundo.

Esta década fue testigo de la aparición de un nuevo estilo de dispositivos: el audífono de adaptación abierta o con receptor en el canal. Estos nuevos audífonos microdigitales combinaron una mejor calidad de sonido con la comodidad en el uso y brindaron una solución discreta a un rango más amplio de casos que nunca. Durante este período, también se hizo posible lograr la conectividad mediante la introducción de los primeros accesorios de audífonos compatibles con Bluetooth.

La tecnología de los audífonos está atravesando en estos momentos un rápido avance. Los nuevos audífonos digitales inteligentes analizan el entorno del usuario y realizan ajustes automáticos para maximizar el rendimiento; al mismo tiempo, son totalmente invisibles porque se colocan dentro del canal auditivo. La conectividad también ha mejorado exponencialmente. Los audífonos actuales pueden comunicarse directamente con los Smartphones, lo que significa que los usuarios son capaces de escuchar música, la televisión, o mantener conversaciones telefónicas a través de sus audífonos.

En los próximos años, veremos cómo los audífonos evolucionarán a dispositivos verdaderamente inteligentes. Esta nueva generación de dispositivos aprovechará la tecnología incorporada a los Smartphones y ofrecerá nuevas posibilidades. Los usuarios podrán interactuar directamente con sus dispositivos y acceder a nuevas funcionalidades a través de sus aplicaciones móviles. La inteligencia artificial permitirá que los Smartphones se comuniquen automáticamente con los dispositivos, con el fin de maximizar la audición para que se adapte a todos los contextos y ambientes.

La experiencia de los clientes avanzará a medida que avancen las tecnologías en materia de audición. Los avances en conectividad y tecnologías inteligentes se extenderán a la adaptación y ajuste de los audífonos, lo que creará una experiencia de 360°. Las aplicaciones móviles abrirán la puerta visitas virtuales en las que los Audioprotesistas podrán hacer ajustes en los audífonos de forma remota a través de los dispositivos inteligentes. Combinar la inmejorable atención al cliente proporcionada en tienda con la accesibilidad de una visita virtual permitirá dar un servicio integral y flexible, totalmente personalizado para el usuario.

El futuro de la tecnología en materia de audición es la invisibilidad. Dispositivos minúsculos y totalmente conectados eliminarán la necesidad de utilizar baterías y se usarán de una manera completamente diferente a la de los audífonos que conocemos hoy en día. Es probable que estos dispositivos se integren en una solución total de tecnología portátil que ofrezca un amplio abanico de funcionalidades relacionadas con la salud y bienestar, así como un enlace virtual con el Audioprotesista.